miércoles, 28 de junio de 2006

Romper con lo instalado

Antes del inicio de la Copa de Mundo Alemania 2006 aparecía Brasil como el máximo (y para muchos único) candidato para coronarse campeón. Sin embargo, el comienzo de la competencia evidenció desde el primer momento –desde el partido ante Croacia- falencias graves en el conjunto dirigido por Parreira. En los que defienden a los pentacampeones de modo más vehemente apareció la máxima de que el Scratch juega cuando quiere y por eso cuando estuvo en apuros respondió con goles.

Tras los cuatro partidos que disputó no tiene ya sustento decir que es el máximo candidato. Rápidamente se señalará que ganó sus cuatro cotejos y recibió un solo gol, justamente cuando puso un equipo en el cual reservó varios titulares. Pero si bien las estadísticas son útiles para establecer tendencias, muchas veces estas no reflejan la realidad. Ver el partido que hoy Brasil le ganó 3 a 0 por octavos de final a Ghana es una clara muestra de esto.

Hasta aquí se enfrentaron con Croacia (eliminado en la primera ronda), Australia (disputaba un mundial después de 32 años), Japón (también afuera en la etapa de grupos) y Ghana (debutante en mundiales). Ante estos rivales le alcanzó con destellos de algunas de sus individualidades. Ahora se verán las caras con equipos de otro peso específico.

Brasil se comporta como un equipo viejo, aburguesado, desequilibrado, sin recuperación de pelota y además parece que con algunas internas entre sus estrellas. Cafú, Emerson y Roberto Carlos sienten los kilómetros que recorrieron sus piernas en tantos años de carrera, mientras que Ronaldinho, Adriano y Ronaldo parecen haber ido a Alemania con su ego por demás inflamado. El equipo verdeamarelo por momentos muestra una gran desconexión entre líneas y tiene serios problemas para quitarle el balón a su rival. Solamente Kaká, Dida, Ze Roberto y, por mometos, Lucio parecen entender que están disputando un mundial.

Es evidente que Alemania, Argentina, y hasta Francia, que en sus dos primeros partidos había parecido un seleccionado avejentado y desganado, Inglaterra, sin haber demostrado demasiado, e Italia, muy sólido pero avaro y deslucido, tienen suficientes argumentos futbolísticos para aparecer en el favoritismo por delante, o al menos en la misma línea, de los actuales campeones del mundo.
(Foto: Fifaworldcup.yahoo.com)

Patricio Insua
patinsua@gmail.com

viernes, 23 de junio de 2006

El gran checo

En sus seis años como entrenador de la selección argentina, Marcelo Bielsa no se cansó de ponderar el espíritu amateur de sus dirigidos, pese a ser en su mayoría futbolistas consagrados y económicamente hechos. La muestra de que una abultada cuenta bancaria muchas veces no alcanza para mitigar el dolor que se produce en el orgullo de un deportista ante una derrota la dio hoy el extraordinario Pavel Nedved.

Pese al gran partido que jugó en su debut mundialista cuando se impuso en Gelsenkirchen 3 a 0 ante Estados Unidos por la primera fecha del Grupo E, el prometedor seleccionado de la República Checa no pudo pasar la primera fase de la Copa del Mundo Alemania 2006. Tras los tres puntos obtenidos ante los norteamericanos, llegó la derrota ante Ghana y finalmente la caída ante Italia. Justamente ante el combinado dirigido por Lippi, el checo Pavel Nedved ofreció una conmovedora muestra de entrega y amor propio. En un seleccionado deslucido y apático, el hombre de la Juventus entregó hasta la última gota de sudor para que no se ponga fin a su estadía mundialista. Emocionaba verlo correr y luchar cada pelota contra el durísimo cerrojo defensivo de la Azzurra, que le hizo sentir todo su rigor. Pese a la soledad a la que lo condenaron sus compañeros nunca dejó de insistir en sus intentos. Fue en el mismo instante en que Archundia, el árbitro mexicano del encuentro, decretó el final del partido y la victoria de Italia por 2 a 0 que Nedved cayó de rodillas sobre el césped teutón y con la palma de sus manos contra su rostro intentó ocultar las lágrimas que evidenciaban su dolor.

Considerado desde hace varias temporadas como uno de los mejores jugadores del planeta, actor principal de jugosísimos contratos, en gran checo mostró que aún mantiene vivo ese fuego sagrado y ese hambre de gloria que muchas estrellas futbolísticas suelen dejar en el olvido.
(Foto: As.com)

Patricio Insua
patinsua@gmail.com

miércoles, 14 de junio de 2006

Sin sorpresas

Con el empate 2 a 2 entre Arabia Saudita y Túnez por el grupo H, en partido disputado en el Allianz Arena de Munich, hicieron su presentación las 32 selecciones que participan del mundial de Alemania. Completada la primera fecha de cada una de las zonas, los 16 partidos hasta ahora disputados no dieron lugar a las sorpresas. Para la estadística cabe mencionar que en esa cantidad de encuentros se convirtieron 39 goles, sólo se sancionó un penal (a favor de España y mal cobrado) y tres jugadores fueron expulsados (Avery John, de Trinidad y Tobago, Vladyslav Vashchuk, de Ucrania y Jean Paul Abalol, de Togo).

Con la única excepción del avejentado y desganado equipo francés, el resto de los campeones del mundo que participan de esta edición de la Copa de Mundo (únicamente Uruguay no pudo clasificarse) debutaron con victorias. Aunque con flaquezas defensivas, Alemania se impuso 4 a 2 ante Costa Rica en el partido inaugural. A Inglaterra, poseedor tal vez del mejor mediocampo del Mundial, le alcanzó un buen primer tiempo para vencer por la mínima diferencia a Paraguay. El debut ante Costa de Marfil dejó para Argentina los tres puntos pero también más de un interrogante. Sin dar demasiadas pistas, aunque con la solidez de siempre, Italia se impuso ante Ganha por 2 a 0. Por su parte, Brasil estuvo en apuros ante Croacia y aunque seguramente lo más justo hubiera sido un empate, se impuso 1 a 0 con un golazo de Kaká.

Por detrás de quienes ya conocieron la cima del Planeta Fútbol, también tuvieron estreno con triunfo aquellos que llegaron a tierras germanas con aspiraciones de ser protagonistas. Se destacaron así las muy buenas goleadas de España, 4 a 0 a Ucrania, y de República Checa, 3 a 0 a Estados Unidos. Alentador para Van Basten y sus muchachos fue lo mostrado por Holanda en su victoria 1 a 0 ante Serbia y Montenegro con gol de Robbens, su figura. En tanto, México pese a que tardó en acomodarse en la cancha, justificó su victoria por 3 a 1 ante Irán, mientras que Portugal se impuso 1 a 0 ante Angola, un triunfo merecido pero en el cual el conjunto dirigido por Scolari no mostró un buen juego.

Ganaron los favoritos, apareció esa lógica que muchas veces suele ser imposible de prever en el fútbol. Si se mantiene la tendencia avanzarán a los octavos de final los equipos más poderosos, pero todavía hay lugar para las sorpresas, que en los últimos mundiales se dieron con equipos como Korea, Turquía, Croacia o Suecia, quienes lograron llegar hasta las semifinales.
(Foto: Inforegion.com.ar)

Patricio Insua
patinsua@gmail.com

martes, 13 de junio de 2006

No hay cuco

El Mundial tuvo el debut más esperado, el de Brasil, defensor de título, pentacampeón del mundo y, para la mayor parte de jugadores, técnicos y medios, máximo candidato a coronarse nuevamente el próximo 9 de julio. Sin embargo, quedó demostrado que pese a sus virtudes, el equipo dirigido por Parreira no es imbatible y hay por donde entrarle, sobre todo presionándolo para apurar a los encargados de recuperar la pelota y evitar que se acerquen hasta el arco defendido por Dida.

Si por espectáculo se entiende la conjunción del marco y de lo que se muestra dentro de la cancha, con situaciones de gol, emociones y suspenso hasta el último minuto, entonces Brasil y Croacia protagonizaron lo mejor de lo que hasta ahora se vio en Alemania.

El seleccionado europeo dejó en evidencia falencias que se sabía el Scratch pretendería ocultar y desnudó los problemas defensivos del gran candidato. Fue Prso, el mejor de la cancha, quien se ubicó detrás del veterano Cafú y por allí generó peligro siempre. Nadie es eterno, y el lateral de la Roma sufrió cada vez que lo encararon, lo mismo que Emerson en el centro del campo de juego. Brasil se mostró como un equipo desequilibrado y dio muestras de que cuando lo ataquen va a sufrir. Si bien es lícito pensar que el conjunto verdeamarelo no apareció en su mejor versión, lo cierto es que hoy estuvo en apuros. Croacia le dio la pista al resto de las selecciones que se enfrenten a los actuales campeones del mundo de cómo hay que jugarles para superarlos.

Innegable es la categoría de los jugadores brasileños. Nadie desconoce que Ronaldinho es el mejor jugador del mundo, el más desequilibrante, que Kaká es tan inteligente como exquisito y que Ronaldo y Adriano son dos adictos al gol, aunque hoy el delantero del Real Madrid no gravitó y fue intrascendente la tarea del atacante con nombre de emperador, quien en la última temporada en el Inter hizo menos goles que Julio Cruz, suplente en Argentina. Fue una genialidad, la tremenda pegada de Kaká sobre el final del primer tiempo marcó, la diferencia a favor de los sudamericanos, pero se sabe que la suma de talentos no da por resultado siempre un gran equipo y Brasil deberá mejorar en el aspecto defensivo y equilibrar su juego, ya que en su objetivo de levantar nuevamente el trofeo más preciado deberá enfrentar a equipos de peso y jerarquía. Sin ir más lejos, en octavos se verá las caras con Italia o República Checa.

A favor de Brasil queda, entre otras cosas, que no se despertaron ni Ronaldo ni Ronaldinho, que no se desesperó cuando las cosas no salían de acuerdo a lo planeado y que cuenta con un plantel de muchas variantes. En contra, la floja defensa, la dificultad para recuperar la pelota y que cada equipo que enfrente buscará jugar su partido. Como se esperaba ganó Brasil, pero no del modo que muchos imaginaban.
(Foto: Inforegion.com.ar)

Patricio Insua
patinsua@gmail.com

viernes, 9 de junio de 2006

Puntapié inicial

Tras esperarlo no sin poca ansiedad, se dio inicio a la Copa del Mundo Alemania 2006. En el impactante Allianz Arena de la ciudad de Munich, la selección local se impuso ante Costa Rica por 4 a 2. Desde ahora, entonces, quedarán 63 partidos para saber quién se coronará en el Planeta Fútbol, incógnita que se develará el 9 de julio.

Los primeros 90 minutos de fútbol de la 18ª edición de la Copa de Mundo dejaron la sorpresa de 6 goles, inusual cantidad para un partido inaugural. El equipo dirigido por Jürgen Klismann defendió con la omnipotencia que sólo puede arriesgar un grande cuando juega de local. Así, una línea de fondo que se adelantó sistemáticamente le permitió al mundo ver las exquisitas definiciones de Paulo Cesar Wanchope. Esa forma de defender hizo que el esforzado y digno combinado centroamericano le marque dos goles que en esta oportunidad no fueron la causa de una derrota, pero que advierten que el costo para el tricampeón mundial puede ser mayor contra un equipo de los pesados.

A favor del conjunto germano quedan una apropiación de la pelota casi exclusiva, dos goles de larga distancia de gran factura (convertidos por Lahm y Frings), buen desborde por las bandas, la presencia goleadora de Miroslav Klose y el plus de ser el local, condición con valor agregado si el dueño de casa es una potencia como Alemania, tricampeón del mundo y quien disputó tantas finales como Brasil, siete.

El puntapié inicial del esperado Mundial dejó una sensación agradable por juego y marco. En un mes todo habrá llegado a su final y se conocerá a quien ostentará el título del mundo por cuatro años, período que habrá que esperar para otra cita mundialista. Entonces a disfrutar estos 30 días a puro fútbol.
(Foto: Ole.com.ar - AP)

Patricio Insua
patinsua@gmail.com

miércoles, 7 de junio de 2006

El amor brujo

El amor por la camiseta, tantas veces profesado por los futbolistas, suele quedarse en palabras que se lleva el viento. A la hora de las decisiones los jugosos contratos o las vidrieras que prometen futuras cuentas bancarias con varios ceros ganan con holgura en la disputa contra el sentimiento. Cuando esto parece una realidad inapelable entonces aparece Juan Sebastián Verón, subido a su escoba para volar desde Europa hasta La Plata, su lugar en el mundo.

El hijo de Juan Ramón, mítico símbolo de Estudiantes y autor del gol más importante de la historia del Pincha para consagrarse campeón del mundo en la cancha de Manchester United, regresa al club de sus amores, a vestir la casaca rojiblanca y a respirar el que para él es el aire más puro, el del country de City Bell. Supo vestir los colores de los clubes más poderosos, pero los de Estudiantes de La Plata siempre los llevó pintados en la piel y el corazón, ese corazón que hoy lo hace volver.

Desde que se abrieron las fronteras del planeta fútbol se hizo costumbre que las estrellas retornen al país para dar sus últimos pasos en un equipo vinculado a sus sentimientos, pero lo cierto es que -en la mayoría de los casos- esa determinación la tomaron cuando, sin restar homenajes, en las elites mundiales les abrieron la puerta con cortesía para invitarlos a buscar nuevos rumbos. En cambio, Verón vuelve teniendo la oportunidad de seguir en lel primer plano internacional y lo hace no ante la seducción de un grande de la Argentina, sino ante el reclamo de su genética pincha.

En el mismo momento en que el Inter de Milán, un pesado de una de las ligas más poderosas del mundo, le ofreció un contrato de varios millones de euros, Verón decidió volver a Estudiantes. En días en que por Italia se preguntan cómo Pekerman lo dejó fuera de la nómina mundialista, La Brujita pegó la vuelta. Cierto es que no está en la cresta de su carrera, pero le queda mucho por dar adentro de una cancha y es un refuerzo de lujo no sólo para Estudiantes sino para el fútbol argentino todo. Juan Sebastián Verón priorizó lo sentimental, cosa que muchas veces personas con tanto o más dinero que él relegan en pos de seguir llenando el cofre de lo material.
(Foto: Fotobaires.com)

Patricio Insua
patinsua@gmail.com

domingo, 4 de junio de 2006

Premio retroactivo

Cuando el próximo 10 de junio la selección argentina comience a desandar el camino por el cual buscará llegar a su tercer título del mundo, Hernán Jorge Crespo habrá cumplido su sueño de ser titular en un partido mundialista, de estar entre los once elegidos para debutar en una nueva participación en la Copa del Mundo. Pero, ¿es hoy la mejor de las opciones que Pekerman llevó a Alemania como centrodelantero?

En la última temporada, el delantero formado en River no tuvo continuidad en el Chelsea. El club inglés del magnate ruso Roman Avramovich ya adelantó que no contará para la 2006/2007 con el jugador y volverá a cederlo, como ya lo había hecho anteriormente al Milan. Poca competencia en los últimos meses, de mala racha frente al arco y con un esquema de juego armado por Pekerman en el cual es claro que no se siente cómodo, no parecería que el mes del Mundial lo encuentre a Crespo en condiciones de ser titular. De los seis delanteros argentinos que forman parte de la nómina mundialista, el hombre que convirtió 24 goles con la selección parece ser el de más floja actualidad.

Seguramente el mejor momento de Valdanito haya sido cuatro años atrás, en el Mundial de Corea y Japón, pero en la cita asiática, como había ocurrido también en Francia 98, quedó relegado detrás de Gabriel Omar Batistuta. Como tantos buenos arqueros que quedaron oscurecidos por Fillol o defensores eclipsados por Passarella, a Crespo le tocó correr detrás de un monstruo, un fuera de serie, el máximo goleador histórico de la selección argentina.

Retirado Bati, le llega el premio a Crespo de ser titular en un Mundial, pero este hecho parece ser más un reconocimiento que una decisión apoyada en el presente y en la conveniencia del equipo. Se hace difícil explicar que ante Costa de Marfil juegue Crespo y Tevez lo mire desde el banco. Lo concreto es que en el debut mundialista en Alemania la dupla de ataque estará integrada por Crespo y Saviola, a quien también su club, Sevilla, le adelantó que no lo contará para la próxima temporada. Tevez, el mejor jugador en la tierra de los pentacampeones del mundo, y Messi, la ya recuperada máxima promesa del fútbol mundial, deberán esperar sentados.
(Foto: Fotobaires.com)

Patricio Insua
patinsua@gmail.com

jueves, 1 de junio de 2006

Sin riesgos, ni fútbol

En la antesala del primer mundial en Europa del siglo XXI, la selección argentina eligió como última preparación los entrenamientos antes que los partidos amistosos. Queda en la nebulosa si tal realidad responde a una decisión de Néstor Pekerman o a la muy mala política de la AFA para concretar encuentros preparatorios. Lo cierto que el triunfo por 2 a 0 ante el débil representativo de Angola en Salerno, Italia, fue la única prueba formal del conjunto albiceleste. El resto de la selecciones participantes de la mayor cita futbolística, en cambio, organizaron una nutrida agenda de amistosos.

Si bien es cierto que la no competencia reduce considerablemente el riesgo de lesiones, esta posibilidad también está presente en un entrenamiento. Pero lo más importantes es que sin partidos es difícil tomar dimensión de la realidad futbolística del equipo, así como también del momento de los jugadores de los que se dispone. Más minutos de juego le hubieran servido al equipo para tener mayor rodaje en la búsqueda de su mejor versión para encarar el Mundial.

Los de Heinze, Crespo y Messi son casos puntuales de jugadores que hubieran necesitado mayor competencia para llegar en condiciones óptimas. También hubiese sido provechoso ver más en acción con la celeste y blanca a Rodrigo Palacio, de furiosa actualidad, y ensayar variantes como precaución. Pekerman terminará de conformar el equipo en el trascurso de la Copa de Mundo; llegue hasta la instancia que llegue, seguramente el equipo que debute ante Costa de Marfil diferirá sensiblemente del que dispute el último cotejo en tierras germanas.

Sea porque Pekerman entendiera que la mejor opción eran los entrenamientos o por la incapacidad de la AFA para conseguir rivales, lo cierto es que bien hubiera sido correr el riesgo de buscar llegar de la mejor manera al 10 de junio. Después de todo, casi como regla cabe que los grandes logros implican transitar un camino de riesgos y esfuerzos.
(Foto: Fotobaires.com)

Patricio Insua
patinsua@gmail.com